Tips para elaborar un proyecto de salud

Tips para elaborar un proyecto de salud

Protocolo de investigación

El protocolo de investigación es un documento esencial que se utiliza para formalizar una propuesta de investigación científica de manera convencional y sistemática. Constituye el plan de un proyecto y es fundamental para llevar a cabo una investigación de calidad.

El protocolo de investigación desempeña múltiples funciones. En primer lugar, permite la comunicación efectiva entre los investigadores y la agencia potencialmente financiadora. Además, al plasmar nuestras ideas en papel y releerlas, nos brinda la oportunidad de comunicarnos con nosotros mismos, lo cual resulta sumamente importante. Asimismo, otro objetivo clave es proporcionar al grupo de investigación un método de trabajo sistemático.

El protocolo de investigación en sí mismo es un documento científico que formaliza la propuesta de investigación y establece las condiciones para llevarla a cabo. Este documento incluye una secuencia ordenada de apartados que contienen información relevante sobre los aspectos científicos, éticos y logísticos del estudio. Proporciona directrices que el equipo de investigación deberá cumplir en el desarrollo de la investigación.

Un protocolo científico debe abordar de manera clara y coherente el razonamiento científico, el marco teórico y la justificación del estudio. Además, debe describir de manera precisa los objetivos del estudio, reflexionar sobre la metodología a seguir y garantizar la viabilidad del proyecto.

Es fundamental que todos los apartados de un proyecto de investigación estén interrelacionados entre sí. Esto implica que los objetivos y la hipótesis del estudio se deriven de la lectura del apartado de antecedentes, y que el diseño y los demás apartados de la metodología se alineen con dichos objetivos.

Tanto el cronograma, como el plan de trabajo y el presupuesto deben seguir el mismo hilo conductor.

Estructura de un protocolo de investigación

Título

El título de un proyecto es como una tarjeta de presentación, ya que debe ser claro y describir de manera concisa la idea que se pretende desarrollar. Es importante evitar el uso de siglas o abreviaturas en el título. Se recomienda que no exceda las dos líneas y que no exagere ni mienta en su contenido.

En muchas ocasiones, el título definitivo del proyecto se decide al finalizar la redacción completa del protocolo. Esto se debe a que en ese momento se tiene una mejor perspectiva del contenido en su totalidad, lo que facilita la elección del título más adecuado.

Resumen

El resumen del proyecto consiste en una presentación concisa, generalmente de no más de 250 palabras o 3500 caracteres, en la que se expondrá el objetivo del proyecto, su relevancia y una breve descripción de la metodología. El propósito de este resumen es brindar a los evaluadores una idea general de lo que se pretende lograr con el proyecto.

En algunos casos, también se solicita un resumen en inglés, además del resumen en el idioma principal del proyecto. Aparte del resumen, es común incluir entre tres y cinco palabras clave que resuman los conceptos esenciales del proyecto. Estas palabras clave ayudarán a categorizar y buscar el proyecto de manera más eficiente.

Antecedentes, planteamiento del problema y justificación de la investigación

En la sección de antecedentes, es necesario presentar el planteamiento general del problema, abarcando tanto lo que se conoce como lo que aún se desconoce y sería relevante conocer. Los autores deben destacar la importancia del problema de salud o del tema de estudio en términos de magnitud, frecuencia y distribución. Es fundamental justificar la elección del tema y proporcionar el conocimiento actual sobre el mismo.

También es importante señalar de manera clara las controversias existentes en la bibliografía o la evidencia insuficiente en ese ámbito de conocimiento, y plantear posibles soluciones o enfoques de investigación novedosos. Los antecedentes deben respaldarse con una justificación bibliográfica actualizada y reciente, que respalde la relevancia del problema y del tema de estudio.

Metodología

En la metodología se describe el procedimiento a seguir para alcanzar los objetivos establecidos previamente y responder a la pregunta de investigación planteada. Se compone de varios subapartados que, aunque pueden variar en cada convocatoria de proyectos de investigación, son comunes en general. Aquí la descripción de cada uno:

  • Diseño del estudio: en primer lugar, se debe describir el diseño del estudio, el cual puede ser epidemiológico descriptivo, analítico o cualitativo, dependiendo de los objetivos planteados.
  • Ámbito: también se especifica el ámbito en el que se llevará a cabo el estudio.
  • Población: se detalla la población que se seleccionará para participar en el estudio, incluyendo los criterios de elegibilidad, la estrategia de muestreo y el cálculo del tamaño muestral.
  • Variables: es fundamental definir las variables que se incluirán en el estudio, las cuales deben haber sido previamente establecidas en el apartado de antecedentes, hipótesis y objetivos.
  • Instrumentos de medida: se describen los instrumentos de medida o cuestionarios que se utilizarán, así como los procedimientos para minimizar la aparición de sesgos.
  • Análisis de los datos: otra sección esencial es el análisis de los datos, que se presenta en función de los objetivos específicos detallados previamente.
  • Aspectos éticos: este apartado aborda las limitaciones del estudio y los aspectos éticos. Esto incluye la solicitud de aprobación por parte de un comité de ética u otro organismo pertinente, como la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios cuando sea necesario. También se menciona el consentimiento informado y se detalla cómo se tratarán los datos obtenidos de los pacientes, entre otros aspectos éticos relevantes.

El plan de trabajo y el cronograma

Es necesario que el protocolo se ajuste lo máximo posible a la realidad de lo que ocurrirá en el estudio. Para lograrlo, se incluirá una descripción detallada de todas las fases importantes del estudio, indicando las fechas de inicio y finalización de cada una de ellas, así como los responsables e implicados en cada fase.

Una herramienta muy útil para visualizar y organizar estas fases es la incorporación de un cronograma. Este cronograma permitirá tener una visión clara y ordenada de las actividades y su secuencia temporal a lo largo del desarrollo del estudio. De esta manera, se facilita la gestión del tiempo y la asignación adecuada de recursos para cada etapa del proyecto.

Es fundamental que el cronograma sea realista y se actualice a medida que avanza el estudio, permitiendo realizar ajustes si surgen imprevistos o cambios en el plan original. Esto contribuirá a garantizar la eficacia y el éxito en la ejecución del proyecto.

El equipo de trabajo

Es primordial garantizar la existencia de un sólido equipo de apoyo en el estudio. En caso de no contar con experiencia previa o un currículo relacionado, es importante buscar un aliado. Este aliado ideal sería una persona con experiencia en investigación, capaz de brindar apoyo en la concepción de la idea y que esté familiarizada con los principios éticos fundamentales.

Contar con un buen aliado puede marcar la diferencia en el desarrollo del estudio. Su experiencia y conocimientos en el campo de la investigación pueden ser de gran ayuda para orientar y asesorar en el proceso, asegurando que se cumplan los estándares éticos necesarios.

El aliado puede ofrecer un respaldo valioso al proyecto, proporcionando:

  • Orientación sobre la metodología adecuada.
  • Ayudando en la recopilación y análisis de datos.
  • Brindando una visión crítica y constructiva en todas las etapas de la investigación.

Trabajar en equipo con un aliado experimentado no solo brinda un respaldo adicional, sino que también contribuye a fortalecer el rigor científico y la integridad del estudio.

Presupuesto

El presupuesto del proyecto comprende varias secciones, que incluyen: 

  • Personal.
  • Equipos e inventarios.
  • Materiales fungibles.
  • Gastos de viaje y dietas.
  • Otros gastos adicionales.

Es crucial que todas las partidas presupuestarias estén equilibradas y se ajusten a las tareas previamente descritas. Es decir; cada solicitud de financiamiento debe estar completamente justificada.

Si en algún caso no se solicita presupuesto para algún aspecto importante del proyecto, es necesario proporcionar una justificación sólida que demuestre que se dispone de esos recursos o que se pueden obtener de otras fuentes. Es importante mostrar una coherencia entre las necesidades del proyecto y los recursos asignados en el presupuesto.

El presupuesto debe ser realista y estar respaldado por estimaciones precisas y detalladas de los costos. Además, es recomendable tener en cuenta posibles contingencias y contar con un margen para imprevistos.

Una correcta elaboración y justificación del presupuesto contribuirá a generar confianza en los evaluadores y aumentará las posibilidades de obtener financiamiento para llevar a cabo el proyecto de manera exitosa.

Recomendaciones para la elaboración de un protocolo

La elaboración de un protocolo requiere tiempo, reflexión y madurez, por lo que no se debe dejar para el último momento. Algunas recomendaciones son:

  1. Anticiparse a la publicación de la convocatoria y comenzar a preparar el proyecto con suficiente antelación.
  2. Identificar claramente el tipo de convocatoria al que se va a solicitar financiamiento y adaptar el proyecto en consecuencia. Es importante tener en cuenta que las convocatorias de investigación pueden tener diferentes objetivos, como investigación, innovación, movilidad, formación o desarrollo tecnológico, entre otros.
  3. Revisar los proyectos financiados en convocatorias anteriores para obtener ideas y aprender de las experiencias previas.
  4. Leer detenidamente la documentación de la convocatoria a la que se va a solicitar fondos y asegurarse de tener claros todos los requisitos y documentos necesarios.
  5. Presentar la información de manera estructurada y fácilmente accesible.
  6. Facilitar la localización rápida de la información relevante para los revisores. Para obtener retroalimentación, puede ser útil solicitar la opinión de un revisor voluntario antes de presentar el proyecto.
  7. Al finalizar la lectura del proyecto, debe quedar claro el valor añadido en términos de interés científico de la propuesta y su viabilidad.
  8. Es importante que la propuesta destaque por su contribución significativa y su capacidad para abordar de manera efectiva los desafíos planteados.
Tips para elaborar un proyecto de salud

Información del Autor
  1. Plazas Lorena, Enfermera. Trabajo propio.
Fuentes bibliográficas
  1. Carlos Álvarez-Dardet, Blanca Lumbreras, Elena Ronda y Mª Teresa Ruiz-Cantero; 2018; Cómo elaborar un proyecto en ciencias de la salud; Fundación Dr. Antoni Esteve Llobet i Vall-Llosera 2. E-08032, Barcelona, España.
  2. Fathalla MF, Fathalla MM. Guía práctica de investigación en salud. OPS. Washington: Oficina Regional de la Organización Mundial para la Salud; 2008.
  3. Hulley SB, Cummings SR, Browner WS, Grady DG, Newman TB. Designing clinical research. 3rd ed. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins; 2007.
  4. Kogevinas M, Salas M. Protocolos de investigación. En: Ruiz Frutos C, Declós J, Ronda E, García AM, Benavides FG, editores. Salud laboral. Madrid: Elsevier Masson; 2013. p. 391-8

Última actualización: 21/06/2023

82 / 100

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.