Contenido
Viagra
El Viagra es uno de los medicamentos más reconocidos a nivel mundial. Desde su introducción en el mercado en 1998, ha revolucionado el tratamiento de la disfunción eréctil y ha mejorado la calidad de vida de millones de personas.
En este artículo exploraremos en detalle qué es el Viagra, cómo funciona, sus dosis, vías de administración y precauciones necesarias para su consumo seguro.
¿Qué es el Viagra?
El Viagra, cuyo principio activo es el citrato de sildenafil, es un medicamento perteneciente a la clase de los inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 (PDE5). Fue desarrollado inicialmente como un tratamiento para la hipertensión arterial pulmonar, pero durante los ensayos clínicos se descubrió su efecto en mejorar la erección, lo que lo convirtió rápidamente en un tratamiento líder para la disfunción eréctil.
Se comercializa principalmente en tabletas de 25 mg, 50 mg y 100 mg, adaptándose a las necesidades individuales de cada paciente.
Usos clínicos del Viagra
El uso más común del Viagra es el tratamiento de la disfunción eréctil (DE), una condición caracterizada por la incapacidad persistente de lograr o mantener una erección suficiente para una relación sexual satisfactoria. Además, el Viagra se utiliza en casos específicos como:
- Hipertensión arterial pulmonar: Ayuda a relajar los vasos sanguíneos y mejorar el flujo sanguíneo en los pulmones.
- Mejora del rendimiento cardiovascular: En estudios limitados, se ha investigado su potencial para mejorar la circulación en ciertas condiciones médicas.
Cómo funciona el Viagra en el cuerpo
El Viagra actúa inhibiendo la enzima PDE5, que es responsable de la degradación del GMP cíclico, una molécula que favorece la relajación del músculo liso en los vasos sanguíneos del pene. Esto mejora el flujo de sangre hacia el pene en respuesta a la estimulación sexual, facilitando una erección.
Sin embargo, es importante aclarar que el Viagra no causa una erección automáticamente, sino que requiere estímulo sexual para ser efectivo.
Dosis recomendadas de Viagra
La dosis recomendada de Viagra varía según las necesidades y la respuesta de cada paciente. Los rangos más comunes son:
- Dosis inicial estándar: 50 mg, administrados una hora antes de la actividad sexual.
- Dosis ajustada: Puede aumentarse a 100 mg o reducirse a 25 mg dependiendo de la tolerancia y efectividad.
- Frecuencia máxima: Una vez al día.
Es esencial seguir las indicaciones del médico y no exceder la dosis recomendada para evitar efectos adversos.
Vías de administración del Viagra
El Viagra se administra exclusivamente por vía oral. Las tabletas deben ingerirse con agua, preferiblemente con el estómago vacío para una absorción más rápida.
El efecto del medicamento suele aparecer entre 30 y 60 minutos después de su consumo, alcanzando su máxima eficacia aproximadamente a las 2 horas y manteniéndose activo durante unas 4 a 6 horas.
Efectos secundarios del Viagra
Aunque generalmente es bien tolerado, el Viagra puede causar efectos secundarios en algunas personas. Los más comunes incluyen:
- Dolor de cabeza.
- Rubor facial.
- Congestión nasal.
- Mareos.
- Indigestión o molestias estomacales.
En casos más raros, puede provocar efectos graves como pérdida repentina de visión o audición, priapismo (erección prolongada y dolorosa) o reacciones alérgicas severas. Si experimenta alguno de estos síntomas, es fundamental buscar atención médica inmediata.
Precauciones antes de usar Viagra
Antes de iniciar el tratamiento con Viagra, es importante tener en cuenta ciertas precauciones:
- Evitar el consumo de alcohol y comidas pesadas: Pueden reducir la eficacia del medicamento.
- Informar al médico sobre otros medicamentos: Especialmente si se están tomando nitratos, ya que la combinación puede causar una peligrosa caída de la presión arterial.
- Evaluar condiciones médicas previas: Como enfermedades cardíacas, hipertensión, diabetes o problemas hepáticos.
Contraindicaciones del Viagra
El Viagra no debe utilizarse en las siguientes condiciones:
- Pacientes que consumen nitratos para el tratamiento de angina de pecho.
- Personas con alergia al sildenafil.
- Aquellos con antecedentes recientes de accidente cerebrovascular o infarto de miocardio.
- Pacientes con presión arterial extremadamente baja (hipotensión).
Uso recreativo del Viagra y riesgos
En los últimos años, el Viagra ha ganado popularidad como un potenciador sexual en personas sin disfunción eréctil. Sin embargo, este uso recreativo no está recomendado y conlleva riesgos significativos, como:
- Dependencia psicológica.
- Efectos secundarios innecesarios.
- Interacciones peligrosas con drogas recreativas o alcohol.
El uso sin supervisión médica puede ocasionar más daño que beneficio, especialmente en personas jóvenes y sanas.
Mitos y realidades sobre el Viagra
Alrededor del Viagra circulan muchos mitos. Algunos de los más comunes son:
- Mito: El Viagra aumenta el deseo sexual.
- Realidad: No afecta la libido, sólo mejora la respuesta eréctil.
- Mito: Es seguro usarlo sin receta médica.
- Realidad: Siempre debe ser recetado por un médico, ya que no es adecuado para todos.
- Mito: Es una solución permanente para la disfunción eréctil.
- Realidad: Sólo actúa mientras está en el sistema, no resuelve las causas subyacentes.
Alternativas al Viagra
Existen otras opciones para tratar la disfunción eréctil:
- Tadalafilo (Cialis): Actúa más prolongadamente.
- Vardenafilo (Levitra): Tiene un perfil similar al Viagra.
- Terapias no farmacológicas: Incluyen bombas de vacío, implantes penianos y terapia psicológica.
Cada alternativa tiene sus ventajas y desventajas, por lo que es importante discutirlas con un médico.
El Viagra es un medicamento revolucionario que ha transformado la vida de millones de personas al tratar de manera efectiva la disfunción eréctil. Sin embargo, como cualquier fármaco, su uso debe ser responsable y bajo supervisión médica para garantizar su seguridad y eficacia. Comprender sus dosis, efectos y precauciones es clave para aprovechar sus beneficios mientras se minimizan los riesgos.
Información del Autor
- Plazas Lorena. Enfermera.
Referencias bibliográficas
- Aguilar Reguero, José Ramón; Aranda Aguilar, Francisco, 2014, Guía Farmacológica, Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, pp: 1-200, Málaga, España. Recuperado de: Guía farmacológica 061.pdf
Última actualización: [18/11/2024]